domingo, 16 de mayo de 2010

UNA FIESTA SOLEMNE



ASCENSIÓN DEL SEÑOR
Hoy celebramos los cristianos, con gran solemnidad, la festividad de la Ascensión del Señor a los Cielos, en el domingo anterior a Pentecostés. Es una de las fiestas más importantes en el calendario litúrgico. Los evangelios nos narran que cuarenta días después de la Resurrección, después de haber cumplido su misión en la tierra, Jesús se reunió con sus discípulos y les dio las últimas instrucciones. Poco después, se fue elevando hasta que le perdieron de vista, oculto por un nube. Una nueva etapa se abre. Los discípulos deberán continuar su obra. La semilla del amor estaba sembrada y era tiempo de cuidarla y hacerla crecer. Por nuestra fe, tenemos la absoluta seguridad de que volverá al fin de los tiempos, pero nos ha dejado una importante tarea de transformación de la sociedad. No lo vemos físicamente, pero está entre nosotros animándonos a seguir su ejemplo. La Ascensión es un signo de confianza en la Providencia, pues así sabemos que está junto al Padre intercediendo por nosotros.
Jesús María Uriz

miércoles, 12 de mayo de 2010

LUCHA CONTRA LA CRISIS

LAS MEDIDAS
Es evidente que la grave situación económica en la que nos encontramos, con millones de personas en paro, está teniendo consecuencias muy duras para los ciudadanos. La velocidad de ascenso del déficit público no puede mantenerse más tiempo. Lo que se nos ofrece es un catálogo de medidas improvisadas sin memoria económica. Ante la mano tendida del Partido Popular, Rodríguez Zapatero ha preferido la soledad. Entre la reducción del gasto corriente y la inversión va por el camino fácil, pero equivocado, de la redución de la inversión pública. Se echa en falta un plan de privatizaciones. No aborda la reestructuración del sector público con la supresión o fusión de ministerios. Las Comunidades Autónomas deben reducir su estructura y costes, pero eso no puede hacerse por decreto. Hay que reducir las subvenciones a partidos, sindicatos y eliminar muchas que carecen de justificación. No se han negociado estas medidas con nadie y pueden producir resistencias que harán muy difícil su aplicación. Es el diálogo y no la imposición el método más adecuado, pero no debe temblar la mano si se han dado las explicaciones adecuadas. Los intereses de sindicatos que defienden sus intereses, que pueden ser legítimos, no pueden ir en contra de los ciudadanos.
Jesús María Uriz

sábado, 1 de mayo de 2010

1 DE MAYO

DIA DEL TRABAJO. ¿Y EL PARADO?
Un año más, llega este día en que conmemoramos el Día Internacional del Trabajo. Esta es una fecha evidentemente reivindicativa. Poco hay que celebrar en una sociedad donde se producen tantas injusticias. Muchas personas de buena voluntad acudirán a las diferentes manifestaciones. Vaya mi recuerdo para millones de personas que no tienen un empleo en que ganar un salario para atender a sus necesidades de subsistencia. Las Administraciones Públicas son ineficaces y consumen recursos económicos y humanos tan necesarios. La reducción del elevado déficit público es urgente. La sociedad ha evolucionado y las reivindicaciones no pueden ser las mismas. Son necesarias importantes reformas en el terreno educativo y laboral. Los sindicatos no pueden seguir siendo esos entes burócratas que forman el bunquer sindical que se opone a todas las reformas necesarias para construir el futuro entre todos. Los parados queremos trabajo, no subsidios; participar en todas las decisiones que nos afectan. ¿Quién nos representa? Este artículo no tiene foto. Que cada cual, de acuerdo con su criterio, ponga la que desee. Recordamos a esa persóna anónima que quiere tener futuro, esperanza, formación, que quiere educar a sus hijos en unos valores compartidos, pero no puede. Son los nuevos marginados. A ellos va dedicado este comentario.
Jesús María Uriz